El día que descubrí que mi piel estaba deshidratada

Una noche fría santiaguina, me dirigí al Parque Arauco con más que una inquietud, una necesidad. Quienes me conocen sabrán que tengo una obsesión muy sana con la exactitud, la hidratación de la piel y las rutinas de belleza.

Sé varias cosas de mi piel: soy alérgica crónica, se me reseca fácilmente y en mis peores momentos ni siquiera he podido usar maquillaje porque están tan deshidratada que se me descascara. Así que desde que me hice el hábito de cuidarme el rostro que necesito mayor exactitud a la hora de comprar productos.

Durante el mes de julio, Kiehl’s tendrá una campaña llamada #DéjanosCambiarTuPiel, que consiste, principalmente, en algo que buscaba hace mucho: saber con exactitud numérica el nivel de hidratación y oleosidad de mi rostro y qué tipo de productos necesito.

Una KCR (las chicas que atienden Kiehl’s) llamada Natalia me recibió amablemente en la Boutique del mall. Le dije mi objetivo, me senté frente a un mesón con varios productos, y tomó dos herramientas muy interesantes.

Arriba: Máquina que mide nivel de hidratación de la piel ; Abajo: Test de parches que miden oleosidad

Mientras Natalia aplicaba el test de parches, conversábamos: «El test de parches mide el nivel de oleosidad que tienes en el rostro, las glándulas sebáceas de tu piel. En este momento tú tienes la piel más normal en la zona T (frente y nariz), pero es más seca en el área de las mejillas.»

Respiro hondo. Ahora viene la maquinita que mide el nivel de hidratación (que desde que la vi me dejó fascinada, me la aplicaría todo el día), es decir, el porcentaje de agua que tienes en tu piel.

—¿Cómo sientes la piel en el rostro? —me pregunta Natalia.

—La verdad, la siento más seca. Por ejemplo, cuando salgo de la ducha tengo la piel súper tirante, entonces trato de usar cosas hidratantes. Y soy muy sensible, se me hacen rojeces de la nada y cuando se me seca, se me seca mucho.

Como si esperara un resultado de un examen o más bien, de una sentencia, ella hizo una pausa y dio su veredicto.

—Tu porcentaje de hidratación es muy bajo: un 22%. Lo ideal sería tener un nivel de hidratación sobre un 45%. La sequedad en la piel también produce que esté más sensible a la agresión, al frío. Lo ideal es que uses productos bien hidratantes para el rostro.

¡¿¡¿¡¿22%?!?!?! ¿Acaso soy una momia? ¿Qué tan cerca estoy de… morir? Mientras me autoflagelaba mentalmente, le comienzo a explicar a Natalia mi rutina de belleza nocturna: utilizo un limpiador al agua, luego un agua termal, finalmente una crema de contorno de ojos y una crema hidratante. Cabe destacar que dos de estos cuatro productos son coreanos.

Mesón Kiehl’s

Le pregunté a Natalia cómo podía detectar en mi casa mi tipo de piel: «Las pieles secas por lo general cuando sales de la ducha se tiende a sentir mucha tirantez en el rostro, sobretodo en el área de las mejillas. Es fácil de detectar«, me responde, y yo me tiro las mejillas como si las fuera a pegar a mis orejas para indicarle que justamente así salgo de bañarme.

«La piel grasa, por lo general, cuando sales de la ducha la sientes muy normal, no tienes esa sensación«, agrega, y me da un dato importantísimo para las pieles grasas:

La gente de repente se tiende solo a lavar la piel una y otra vez y no se hidratan, porque piensan que la crema te generará mayor grasitud. Pero al solo limpiar se reduce la barrera protectora de la piel, y ahí es cuando se escapa el agua y los aceites. Sí o sí necesitan una crema, más liviana, para equilibrar esta barrera»

Luego de aclararme esto, me pregunta cuánta agua tomo. Le dije que no era muy buena para tomar agua sola (lo cual confirmo mientras escribo esto y miro de reojo una botella llena que tengo al lado del escritorio), y me recomienda hidratarme más: «Aparte de cuidarte la piel con buenos productos, tomar agua es esencial para mantener la piel sana«.

A mí hace un par de semanas me pasó que pese a que tengo piel seca se me puso la zona T mucho más grasa de lo normal ¿Por qué pasa eso?

Nuestra piel tiende a cambiar cada tres meses de tipo, y depende de lo que estés utilizando también. Que se ponga más grasa o más seca depende de lo que estuviste haciendo en el minuto en que tuviste la piel más grasa. Probablemente solo te estabas limpiando la piel y no te estabas hidratando, quizás estabas con un problema más nervioso o estrés.

¿Pero eso no cambia el tipo de piel que ya tengo?

Lo importante es que en este momento tienes la piel seca/deshidratada. Para cuando te compres de nuevo productos, quizás no necesariamente sea el mismo tratamiento el que necesites. Lo ideal es que vuelvas a evaluar tu piel y vuelvas a ver qué tipo tienes en ese momento y qué necesitas comprar.

Pasa mucho que nos gusta mucho el maquillaje y no estamos pendientes del tipo de piel que tenemos.

Si la piel está seca y te maquillas, el maquillaje se marca mucho más. Por eso cada vez que vengas y te compres un tratamiento, analiza en ese momento tu piel para qué requieres.

El catálogo de la campaña, donde te dejan indicado lo que necesitas.

Luego de nuestra conversación, como parte de la campaña, Natalia arma una rutina especial para mi piel desértica: Un limpiador al agua, un tónico, que repara la barrera de la piel después de limpiar, serum, que ayuda a retener el agua en la piel, haciendo efecto de anclaje, trabajando en capas internas, crema de contorno de ojos y una crema hidratante, idealmente una con factor solar para el día y una solo hidratante de noche. Me regala las muestras de todo lo que necesito. Yay.

«Es súper importante que los productos que tú utilizas sean solo tus productos, no es recomendado para nosotros que por ejemplo que tú le digas a otra persona que haga tu misma rutina, porque puede tener distinta piel», finaliza.

¿Moriré de deshidratación?

Me despido de la simpática KCR y me voy, como con cien necesidades creadas más. Cabe mencionar que esta campaña es una asesoría gratuita que no les tomará más de diez minutos, así que bueno, estoy pensado en ir una vez a la semana (?).

Source: Belelu