Del Potro y el lugar en el que empezó todo

Era 2009 y Juan Martín del Potro ya asomaba como la próxima gran figura del tenis mundial. Con 21 años, una torre de casi dos metros llegada de Tandil llamaba a las puertas de la élite con su primer torneo de Grand Slam. Mientras levantaba el US Open, el argentino tocó el cielo. Pronto, cayó en desgracia y, ahora, sueña con repetir su gesta casi una década después.

Del Potro y el lugar en el que empezó todo

‘Delpo’ arrancó el torneo en 2009 como una de las promesas más firmes de la ATP tras llegar a semifinales en Roland Garros y a cuartos en el Abierto de Australia.

A pesar de su edad, sus impresionantes condiciones físicas, su potente saque y su derecha demoledora lo convertían automáticamente en un serio aspirante al título en la era del suizo Roger Federer.

Como sexto cabeza de serie, solo por detrás de Federer, el escocés Andy Murray, el español Rafael Nadal, el serbio Novak Djokovic y el estadounidense Andy Roddick, Del Potro fue eliminando rivales y superando rondas casi sin despeinarse.

Así, se plantó en cuartos de final tras haber cedido un único set, ante el austriaco Daniel Köllerer, en tercera ronda.

Ahí, el croata Marin Cilic cayó en cuatro mangas y Nadal fue barrido en tres por un triple 6-2. Nadie parecía capaz de frenar a ‘Delpo’, que derribaba contrincantes como si fuera un peso pesado luchando contra medianos. Solo le quedaba un escollo, el legendario Federer.

Y, como la epopeya que estaba protagonizando, firmó uno de los mejores partidos de la historia del torneo para acabar levantando la copa de campeón tras cinco emotivos sets (3-6, 7-6, 4-6, 7-6, 6-2).

Del Potro se unía así al mítico Guillermo Vilas y a Gabriela Sabatini como los únicos argentinos en ganar el Abierto de Estados Unidos y también con Gastón Gaudio como los únicos en tener un torneo de Grand Slam.

Supervivencia

Mientras elevaba el trofeo y miraba hacia arriba, se sintió gigante.

Allí parecía empezar todo. Pero, poco después, todo cambió. Lo que se suponía era el comienzo de una carrera llena de títulos, su primer Grand Slam de muchos, pronto se convirtió en una lucha por su supervivencia deportiva, con tres operaciones en la muñeca izquierda y otra en la derecha que lo tuvieron al borde de la retirada.

«Dios sabe por qué razón no llegué a abandonar. Lo intenté y lo intenté, día tras día, encontrar una solución a mis problemas de muñeca. Y acabé lográndolo», confesó en junio en Roland Garros.

«Su antiguo él»

Ahora, casi una década después, el US Open recibe de nuevo a uno de sus hijos predilectos. Y él reconoce que el de Flushing Meadows es su campeonato preferido.

«Como todo el mundo sabe, este es mi torneo favorito del circuito. Tengo altas expectativas en Nueva York. Tengo muchas ganas de empezar el torneo», señaló ‘Delpo’ el viernes.

El albiceleste saltará a la pista frente al estadounidense Donald Young el lunes como tercero de la ATP, la clasificación más alta de su carrera, y a su mejor nivel… desde 2009. No en vano, logró en marzo en Indian Wells su primer Masters 1000 y en Estados Unidos siempre ha elevado su nivel.

«Me sorprendió lo mucho que le costó volver a su mejor nivel (tras sus lesiones) pero creo que ya está ahí. Se parece a su antiguo él. Estoy muy contento por ello», dijo Federer tras caer ante el tandilense en la final del desierto de Indian Wells.

Ahora, con sus lesiones «completamente en el pasado», Del Potro saldrá a competir con las «mejores expectativas» y con un sorteo que le ha acompañado, solo pudiendo medirse a Nadal en semifinales y a Federer o Djokovic en la última instancia.

El US Open lo encumbró al inicio de su trayectoria deportiva y, ahora, puede devolverle al lugar que no debió dejar nunca. Nueve años y cuatro operaciones después, sin «nada que perder en el tenis, por eso estoy disfrutando tanto». AFP / RA

Categoria: 

Source: Informe21

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *